¿Cómo podemos instalar Windows 98 y Windows XP en un mismo Disco Duro?
Veamos de que forma podemos hacerlo.
El método que vamos a emplear es crear dos particiones. En una vamos a instalar el Windows XP y en la otra el Windows 98.
El sistema a seguir es el siguiente:
Supongamos que el disco duro que vamos a utilizar es de 40 GB. Arrancamos desde el CD-Disquete de Windows 98, para ello debemos tener en la secuencia de arranque como primera unidad de arranque, el lector de CD o la disquetera y ejecutamos FDISK.
Si tenemos alguna partición la eliminamos para dejar el disco duro limpio. A continuación creamos una partición primaria en formato FAT32 del tamaño que deseemos y la activamos. En esta partición en donde vamos a instalar el Windows 98.
Una vez activada la partición, reiniciamos (siempre hay que reiniciar después de ejecutar FDISK) y hacemos la instalación de Windows 98.
Una vez que tengamos completamente instalado y configurado Windows 98, podemos seguir con la instalación de Windows XP.
Para ello lo primero que hay que hacer es arrancar el PC con desde el CD-ROM de Windows XP, para lo que tendremos que asegurarnos de tener en la secuencia de inicio como primera unidad de arranque el CD-ROM.(Arriba dijimos que tendriamos que poner el sitio de arranque de nuestro cd-disquete de Win 98, asique si no es el mismo sitio, habra que entrar de nuevo en la BIOS y volver a cambiarlo.)
Comprobado este punto, ponemos el CD de Windows XP en el CD-ROM y arrancamos desde el.
Comienza la instalación de Windows XP y nos vamos a encontrar con un par de pantallas a las que debemos prestar mucha atención.
En una primera nos va a informar de que el instalador de Windows XP ha encontrado una versión de Windows instalada, dándonos una serie de opciones.
En esta pantalla debemos elegir la opción:
Instalar Windows (Intro o Enter), NO reparar (R), ya que en ese caso nos sobreescribiría el Windows 98 recién instalado.
Una vez aceptada la licencia de instalación, la siguiente pantalla que nos muestra es la de las particiones, en la que nos va a aparecer la partición donde tenemos instalado nuestro Windows 98 ( C: ) y el resto del disco sin particionar.
En esta pantalla indicamos que queremos instalar Windows XP en el espacio que tenemos sin particionar.
En la siguiente pantalla que veremos se nos pide que indiquemos el formato en que queremos esta partición.
Ciertas puntualizaciones de interés:
- Las particiones FAT32 no pueden gestionar archivos con un tamaño superior a los 4Gb.
- Desde una partición en formato FAT32 no se puede acceder a una partición NTFS, y por lo tanto no vamos a poder ver los archivos que tengamos en esta partición.
- Las particiones FAT32 son TOTALMENTE TRANSPARENTES para NTFS. Esto quiere decir que desde una partición NTFS vamos a poder acceder a todos los datos que tengamos en la partición del tipo FAT32 sin ningún problema, pudiendo incluso trabajar con ellos.
Bien, una vez formateada esta partición,sigue la instalación de Windows XP, hasta terminar de instalarlo.
Debemos estar pendientes a los reinicios, ya que se nos mostrará una pantalla pidiéndonos en que partición va a reiniciar. Mientras Windows XP se esté instalando debemos elegir el arranque en Windows XP.
Y ya está!! Rapido, sencillo y.... para toda la familia