Despues de un largo tiempo de ausencia, me dirijo a ustedes para comentarles una pequeña
vivencia.
Cuando me encontraba estudiando en el Colegio Militar (Tarea para los Clabers: Averiguar a que
COMIL me refiero), tuvimos que salir de la ciudad para conocer un poco mas la instrucción militar
nocturna. Para ello nos dirigimos a una Base de Entrenamiento, alejada de la mayoria de la
civilizacion.
Cuando llegamos alla, una especie de calle de honor nos recibio. Al momento de pisar el recinto,
uno de los militares comenzo a recitar una especie de oración. No recuerdo muy bien los detalles
acerca del resto de la bienvenida, pero eso si; la oracion se quedo dentro de mi, por muy largo
tiempo.
La oracion iba mas o menos asi:
Dadme mi Dios, lo que te resta
Dadme lo que jamas nadie te pide
Yo no te pido el descanso, ni la tranquilidad
Ni del alma, ni del cuerpo
Yo no te pido la riqueza, ni el exito
Ni siquiera la salud
Todo eso te piden tanto, Señor, que ya no debes tener mas
Dadme mi Dios, lo que te resta
Dadme lo que la gente rechaza
Yo quiero la inseguridad y la preocupacion
Yo quiero la tormenta y la fatiga
Y que tu me las des, mi Dios, definitivamente
Que yo este seguro de siempre tenerlas
Porque no siempre tendria el coraje de pedirtelas
Dadme mi Dios lo que te resta
Dadme lo que los demas no quieren
Pero dadme tambien el coraje
Y la fuerza y la fé
Despues, Googleando, me encontre con que fue escrita por las épocas de la Segunda Guerra
Mundial, en el bolsillo de André Zirnheid, un paracaidista fallecido en Libia, el 26 de julio de 1941.
Para muchos, que han estado en un campo de batalla (sean veteranos de guerra, visual
developers, programadores, militares), que arriesgan sus vidas casi a diario, sea cual sea su i
inclinación religiosa, esta oración, en lo personal, me renueva.
Espero sus opiniones, batasos o lo que me quieran enviar.
Gracias.